En tiempos remotos, nuestros antepasados del área metropolitana de Cúcuta conseguían su sustento pescando, cazando animales, pequeños y en ocasiones presas muy grandes que requería estrategia e ingenio a través deun trabajo en equipo; también recolectaban frutos y plantas silvestres. A medida que fueron evolucionando estas comunidades, desarrollaron y perfeccionaron técnicas en la fabricación de artefactos de piedra y posteriormente utensilios de arcilla.
Para el estudio de las sociedades antiguas a partir de sus restos materiales, el hombre ha estructurado una disciplina denomina arqueología.
Según la investigación arqueológica, en Colombia durante la mayor parte de su desarrollo, las sociedades humanas que poblaron la parte norte de América del Sur formaron grupos de cazadores-recolectores, es decir fueron sociedades nómadas.
Las herramientas rudimentarias elaboradas por estos primeros pobladores se encontraron dispersas en las veredas de Los Vados y Agualinda, en particular las diversas piezas que se han hallado se han concentrado en la vereda Los Vados y están elaboradas con material obtenido de una roca llamada chert; se han encontrado gran cantidad de cortadores, raspadores, cinceles, punzones, cuchillos y una punta de proyectil en buen estado de conservación. Fotos 5,6,7 y 8.
Es importante señalar que los hallazgos corresponden a afloramientos favorecidos por la erosión hídrica y eólica, características de estos suelos. Existe la hipótesis que la materia prima con la cual se elaboraron estas piezas, posiblemente fue extraída del río Pamplonita, según una de las investigaciones realizados por el arqueólogo Víctor González Fernández, quien ha desarrollado varios estudios en la zona, dentro del proyecto Arqueológico Valle del Pamplonita. Especialmente ha centrado sus investigaciones en el Paleoindio, es decir en los primeros habitantes que deambularon el territorio colombiano, específicamente en esta zona de Norte de Santander, los alrededores del municipio Los Patios: las veredas Los Vados y Agualinda. He tenido el privilegio de acompañar en todos sus estudios realizados en la zona y sus conocimientos y apoyo han enriquecido el desarrollo del Museo Los Vados.
En el informe final de 2001 el doctor González Fernández concluye: "En síntesis, la zona reconocida contiene restos de actividad humana aparentemente continuos por más de 15.000 años. El área puede, así ser considerada como un laboratorio arqueológico de singular valor cultural y científico. Se espera que en el futuro se realicen estudios específicamente orientados a reconstruir cada uno de los periodos de ocupación y a resolver muchos interrogantes que aun quedan.
Este proyecto es uno de los primeros en el norte de Suramérica en el que se ha logrado recuperar información sobre distribución en el espacio de asentamientos de cazadores recolectores. Esa información espacial es crucial para comenzar a entender las formas en las que se organizaban las sociedades del Paleoindio y el Arcaico y los factores que intervinieron en las transformaciones sufridas por esos patrones..."
También existen artefactos en diferentes clases de piedra que fueron utilizados cuando el hombre se estableció en sitios fijos, es decir cuando se hizo sedentario, permitiendo la elaboración de herramientas de trabajo de diversa índole, tales como: hachas, azadas, cinceles, martillos, manos de moler, metates, yunques y morteros. Fotos 9 y 10.
Para el estudio de las sociedades antiguas a partir de sus restos materiales, el hombre ha estructurado una disciplina denomina arqueología.
Según la investigación arqueológica, en Colombia durante la mayor parte de su desarrollo, las sociedades humanas que poblaron la parte norte de América del Sur formaron grupos de cazadores-recolectores, es decir fueron sociedades nómadas.
Las herramientas rudimentarias elaboradas por estos primeros pobladores se encontraron dispersas en las veredas de Los Vados y Agualinda, en particular las diversas piezas que se han hallado se han concentrado en la vereda Los Vados y están elaboradas con material obtenido de una roca llamada chert; se han encontrado gran cantidad de cortadores, raspadores, cinceles, punzones, cuchillos y una punta de proyectil en buen estado de conservación. Fotos 5,6,7 y 8.
Es importante señalar que los hallazgos corresponden a afloramientos favorecidos por la erosión hídrica y eólica, características de estos suelos. Existe la hipótesis que la materia prima con la cual se elaboraron estas piezas, posiblemente fue extraída del río Pamplonita, según una de las investigaciones realizados por el arqueólogo Víctor González Fernández, quien ha desarrollado varios estudios en la zona, dentro del proyecto Arqueológico Valle del Pamplonita. Especialmente ha centrado sus investigaciones en el Paleoindio, es decir en los primeros habitantes que deambularon el territorio colombiano, específicamente en esta zona de Norte de Santander, los alrededores del municipio Los Patios: las veredas Los Vados y Agualinda. He tenido el privilegio de acompañar en todos sus estudios realizados en la zona y sus conocimientos y apoyo han enriquecido el desarrollo del Museo Los Vados.
En el informe final de 2001 el doctor González Fernández concluye: "En síntesis, la zona reconocida contiene restos de actividad humana aparentemente continuos por más de 15.000 años. El área puede, así ser considerada como un laboratorio arqueológico de singular valor cultural y científico. Se espera que en el futuro se realicen estudios específicamente orientados a reconstruir cada uno de los periodos de ocupación y a resolver muchos interrogantes que aun quedan.
Este proyecto es uno de los primeros en el norte de Suramérica en el que se ha logrado recuperar información sobre distribución en el espacio de asentamientos de cazadores recolectores. Esa información espacial es crucial para comenzar a entender las formas en las que se organizaban las sociedades del Paleoindio y el Arcaico y los factores que intervinieron en las transformaciones sufridas por esos patrones..."
También existen artefactos en diferentes clases de piedra que fueron utilizados cuando el hombre se estableció en sitios fijos, es decir cuando se hizo sedentario, permitiendo la elaboración de herramientas de trabajo de diversa índole, tales como: hachas, azadas, cinceles, martillos, manos de moler, metates, yunques y morteros. Fotos 9 y 10.
Gracias a la riqueza de arcilla en la zona, los antiguos habitantes ya establecidos en un sitio fijo, experimentaron y perfeccionaron la elaboración de objetos cerámicos como vasijas, tejos y volantes de huso. Muy pocas vasijas completas se han encontrado, pero sí muchos fragmentos de variados objetos, que abundan en ciertas partes de la vereda Los Vados; los he clasificado en bordes sin decoración, bordes con decoración, con asa y cuellos simples. También se han encontrado varios volantes de huso que nos evidencian que además de ser agricultores, también eran tejedores los habitantes de esta zona. Fotos 11 y 12.
Con el fin de cumplir con la Ley de Patrimonio arqueológico, se ha registrado ante el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, ICANH, la colección del Museo Los Vados en 30 lotes y/o piezas compuesto por 2.762 fragmentos y/o piezas en cerámica y lítico, bajo el número de registro: 4032, confiriendo tenencia de las mismas, cumpliendo con el régimen legal y las obligaciones que adquieren los tenedores de bienes del Patrimonio Arqueológico.
Información: 315 334 8558 gerardovilla5@gmail.com
Con el fin de cumplir con la Ley de Patrimonio arqueológico, se ha registrado ante el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, ICANH, la colección del Museo Los Vados en 30 lotes y/o piezas compuesto por 2.762 fragmentos y/o piezas en cerámica y lítico, bajo el número de registro: 4032, confiriendo tenencia de las mismas, cumpliendo con el régimen legal y las obligaciones que adquieren los tenedores de bienes del Patrimonio Arqueológico.
Información: 315 334 8558 gerardovilla5@gmail.com